La lectura en caja o “bookbox” es una herramienta educativa dentro de las nuevas metodologías activas, estrategias de aprendizaje donde el protagonista en el aula pasa del profesor al alumnado. Esta fantástica herramienta convive y se complementa con otras como el “flipbook” también denominado folioscopio o el “lapbook” o libro interactivo. En todos ellos combinan elementos desplegables, etiquetas y diferentes materiales (cartulina, cartón, fieltro, goma eva, ...) pero a diferencia de los anteriores, la lectura en caja debe almacenar toda la información en un a pequeña caja que se desplega.
Beneficios
- Es una herramienta educativa fantástica. Los niños participarán en todo el proceso de creación: decisión del tema, búsqueda de información, organización del contenido, síntesis de ideas, etc.
- Es una fuente de motivación, incluso para aquellos a los que no les gusta mucho escribir, y concentración, los niños son capaces de mantener el interés en una caja de lectura durante varios días.
- Retienen lo aprendido mejor que cuando lo hacen de forma tradicional, es decir, memorizando de un libro. Al haberlo creado ellos están más implicados y la huella que les queda es mayor.
- Les ayuda a desarrollar muchas habilidades manuales: tanto los niños pequeños como los más mayores aprenderán a recortar, pegar y ensamblar los minilibros donde se expone la información.
- Potenciarán su autoestima y confianza: están dedicando tiempo y esfuerzo a un proyecto elegido y diseñado por ellos mismos.
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